miércoles, 22 de diciembre de 2010

Cultura

Se ha escrito mucho sobre la falta de cultura de la televisión. Y hay quien dice que no pasa nada, la televisión no debe educar, debe divertir.
No seré yo quien haga un discurso moralista sobre el tema, pero ¿realmente su única función es la de entretener?
Porque si es así, ¿por qué se emite el mensaje del Rey cada Navidad, con lo poco entretenido que es?
Sólo quiero reflexionar sobre dos cuestiones. La primera se refiere a un programa en el que hay un tronista y un grupo de pretendientes. Lo que me sorprende es que se sostenga un programa en el que ninguno de los participantes sabe hablar. Utilizan expresiones como "es que no eres mi prototipo" o "a ver...es que yo... lo que le quiero decir es que si estoy aquí es porque me importa y lo que quiero saber... a ver... si esto es asín o no sé, no sé qué decir" y después de hablar durante un minuto y medio (que eso en televisión es mucho) no han dicho nada.
La segunda se refiere a una escena que he visto hoy en la que una chica que creo que salió en Gran Hermano y después se hizo famosa de plató en plató "colabora" en un programa de televisión. Un chico, que sale cada semana pero no tengo ni idea de quién es, le intentaba hacer una pregunta o, en principio esa era la idea.
Antes de que él pregunte, ella le ataca "y tú, quién eres? eh, quién eres tú? tú qué haces en un programa? quién eres?" echándole en cara que ha saltado a la fama por motivos ajenos a su valía profesional - supongo-. Lo que pasa es que ella no se acuerda que su fama tampoco la ha generado una contratación como consecuencia de una buena formación y un buen currículum.
En fin, es evidente que la televisión aporta poca cultura al espectador medio, y que es importante entretener, pero ¿dónde está el límite? ¿debemos conformarnos con que nos den clases de moral personas sin la suficiente educación como para no insultarse continuamente?
Apaga y vámonos.

martes, 14 de diciembre de 2010

Alarma

Reconozco que los controladores fueron torpes en las formas.
Reconozco, también, que no han sabido explicar hasta ahora cuál era su problema. Por qué se jugaron sus puestos de trabajo. Qué les llevó a tomar una medida tan radical.
Reconozco que el Gobierno ha jugado bien su papel de presentárnoslos como unos privilegiados que cobran mucho, mucho dinero.

Creo que los parlamentarios cobran también mucho, mucho dinero y en múltiples ocasiones su trabajo es infinitamente menor que el de un vigilante nocturno en la entrada de una urbanización.
Creo que los controladores no continuarán cobrando su salario si dejan sus cargos, como hacen los ministros y demás chupópteros que nos da esta democracia.

Pero lo que me hace estar enfadada es que el gobierno estudie mantener el estado de alarma hasta el 7 de Enero. Perdón? si la actividad en las torres de control está normalizada, a qué viene mantener el estado de alarma? Pues es evidente, no quieren que vuelva a pasar lo mismo en las vacaciones de Navidad.

Estado de alarma para asegurarle a la gente poder volar en Navidad? en serio? para eso es el estado de alarma? no creen que los controladores que están declarando en sede judicial, han aprendido la lección?

Consuman, señores, que viene la Navidad. Viajen. Vuelen. No vayan en tren, porque se nos estropea y eso no es culpa de nadie. Pero eso sí, no nos pregunten qué pueden y no pueden hacer, porque eso dependerá de si me apetece o no decretar estado de alarma esta mañana.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Historias

Historia para reír: Paso por delante de un furgón de los antidisturbios aparcado en una tranquila plaza entre dos calles. Dos personas le han preguntado a los polícias por una calle (la que da a la parte de abajo de la plaza) y los policías, con la guía de la ciudad en la mano, contestan "esa calle de ahí arriba".

Historia para llorar: Empecé mal el día, se giró a peor a media mañana, comí algo en diez minutos, volví al trabajo, salí a las 21:45 y, cuando el frío me helaba hasta las ideas sólo pensaba en una cosa: quiero llorar.

Historia para beber: Cada año las calles del Born se llenan de amantes del vino. Este año, quizás por la crisis, el volumen de gente era muy inferior al de otros años. El volumen de vinos era el mismo. Nos gusta!!!

jueves, 21 de octubre de 2010

Bárbaros

Hace unos meses vi un reportaje que se elaboró en la ciudad de Barcelona, en el que se pretendía aportar la visión de los anti-taurinos y los pro-taurinos. Se expresaba la opinión de unos y otros, sin criba y sin que se oyera una voz en off con una autoridad moral superior a la de los entrevistados.

A fin de conocer la opinión de aquellos que estaban en contra de la prohibición, el equipo se dirigió a la Monumental de Barcelona. En la puerta encontraron a tres personas de entre 25 y 35 años, que estaban en Barcelona de vacaciones (eran estadounidenses) y les habían recomendado ir a los toros. Entraban en la plaza con una gran sonrisa, de ver las cámaras, el ambiente, etc.

Las cámaras los encontraron también a la salida, con el rostro descompuesto y, supongo que para no ser políticamente incorrectos ante la cámara porque deberían pensar que aquí criticar a los toros es como quemar la bandera, únicamente decían que no les había gustado nada y que era una barbaridad.

Ayer vi un programa de alto calado cultural, "mujeres ricas" (nótese el sarcasmo). Una de ellas llevaba a su amiga, que era de origen ruso (creo) a los toros. Acudieron al evento: la rica andaluza, la rica rusa y una amiga de la rica rusa. Mejor sitio imposible. Visión perfecta. Cuando el toro empezó a sangrar, la amiga de la rica rusa salió al pasillo porque no podía seguir viendo el espectáculo. La rusa se mantuvo allí hasta unos minutos más, pero finalmente tuvo que salir junto a su amiga.

Estaban las dos, esperando en el pasillo, tapándose los oídos porque -decían- cada vez que hay aplausos es que el toro ha sufrido un poco más, derramando lágrimas de dolor.

Las oía hablar y pensaba que su visión de España es la de unos bárbaros que ponen a un animal en una plaza pública, lo someten a tortura y el pueblo lo aplaude y pide la oreja y el rabo.

Sinceramente, durante esos momentos (en uno y otro vídeo) tuve vergüenza de vivir en un país donde se hacen este tipo de cosas. Y donde, cuando se intenta cambiar para mejorar, unos cuantos lo visten con intereses políticos y obvian la barbarie que supone mantener esta situación.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Miedo

El pasado sábado hubo una concentración en la puerta del consulado francés en Barcelona como protesta por las actuaciones del gobierno francés respecto de los gitanos rumanos repatriados. La lectura del manifiesto mencionaba la palabra "nazi" y proponía una similitud entre el exterminio en Alemania en los años 40 y la expulsión de gitanos en Francia.

Mis acompañantes planteaban que era una mala idea utilizar esa palabra, porque es la utilizada por la derecha recalcitrante de este país, por los palestinos, por los kurdos, etc. Es decir, es una palabra que ha perdido su fuerza por el exceso de uso.

Paralelamente, una amiga me esputó el otro día un discurso sobre lo inconsciente de permitir que los inmigrantes entren sin control en nuestro país. La falta de medidas para evitar que los inmigrantes se hagan con todo. Su obligación de hablar catalán y si no les gusta "que se vayan a su pueblo". El colapso del mercado laboral, el trabajo primero para nosotros y luego ya veremos.

Esta mañana las tres primeras noticias en TV3 eran:

- Un pastor estadounidense plantea el día mundial de quema del Corán. Sólo desconvocará su propuesta si no se construye la mezquita cerca de la zona cero. Y añadían "hoy nos acompañarán un grupo de neoyorquinos. Descubriremos que no todos los estadounidenses están de acuerdo con que se contruya una mezquita cerca de la zona cero"
- El director de un banco alemán ha publicado un libro donde plantea que nos encontramos ante la desmembración de alemania. Culpa de ello al exceso de inmigrantes y especialmente a los de religión musulmana.
- A pesar de la condena que ha hecho la Unión Europea, Francia continúa repatriando gitanos rumanos. Por ahora se han repatriado 80.000 personas.

Y después de eso yo me planteo las siguientes cuestiones:

- Existe un exceso de permisividad con los comentarios racistas y xenófobos.
- Existe una oleada de racismo y xenofobia en Europa que no sé si se puede comparar con el régimen nazi, pero cada vez me lo recuerda más.
- En épocas de crisis los débiles apuntan a la cabeza de los más débiles. Y los fuertes lo aprovechan.
- No debemos permitir ni un solo comentario racista, porque ha dejado de ser políticamente incorrecto hacerlo y todo el mundo se suma al carro.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Tras el verano

Tras el viaje del verano un cúmulo de sensaciones se manifiestan en la cabeza y en la epidermis.

La primera es un pensamiento negativo: se acabó lo bueno, vuelta a trabajar.

La segunda es un escalofrío: he vivido tantas experiencias en un mes como otras personas en toda su vida.

A continuación, las sensaciones, los recuerdos y los pensamientos se mezclan en un totum revolutum y empiezan las obligaciones. "tengo que ver a mi familia" "tengo que enviar aquel mail" "tengo que ordenar las fotos""tengo que organizar esto y aquello" y al final te das cuenta de que las vacaciones son un cúmulo de obligaciones continuas de las que intentamos huir yéndonos de viaje.

Cuando uno vuelve de un viaje la pregunta más común es "¿qué tal por...?" y después de 16 días viajando es difícil resumirlo todo en un frase. Así que la respuesta que he decidido adoptar es "bien, genial, muy diferente" que es tanto como no decir nada.

Para aquellos que habeis preguntado y habeis obtenido esta respuesta, intentaré ir desglosando en este blog todo lo que hemos vivido en esos días. Todas las diferencias, las cosas en común, lo más bonito, la peor experiencia... pero ahora toca trabajar así que habrá que esperar para el primer capítulo.

lunes, 19 de julio de 2010

Deportes

Llega un punto en que esto es desesperante.

Hubo noticia sobre la liga hasta prácticamente el último partido porque matemáticamente no existía un ganador seguro. Hasta el último día de liga, las noticias deportivas hablaban prácticamente sólo de fútbol.

Acabó la liga y al cabo de uno o dos días, se seguía hablando de fútbol porque empezaron los primeros fichajes.

Poco después, la noticia era el fichaje de un entrenador. Pensaba que a los entrenadores se les contrataba y punto, pero la operación merecía ser calificada como fichaje.

Justo cuando se enfrió el tema de cómo le gusta el café a Mourinho por la mañana, y cuánto le echarán de menos en Milán, empezaron los amistosos del mundial. Les dedicaron más minutos televisivos que a verdaderos campeonatos de otros deportes.

Luego vino el mundial. Como España jugó hasta el último partido, tuvimos fútbol para comer, merendar y cenar. La primera semana de después del mundial ha consistido en recordar cada día qué buenos somo, cómo ganamos, qué contentos están todos y cómo se quieren Iker y Sara.

Ayer hizo justo una semana que acabó el mundial y hoy, sin darnos tiempo a respirar, nos vuelven a atacar nuevamente con la liga. Lo digo en serio, no puedo más, le estoy cogiendo manía y sé que la culpa no es del fútbol en si. Basta ya!!!!

Y encima, TV3 retransmitirá los europeos de atletismo, por lo que me he sentido aliviada por escuchar una noticia de deporte que no fuera sobre fútbol, y entonces caigo en la cuenta de que lo hacen sólo porque se celebran en Barcelona. Supongo que es una cuestión de obligación moral.

lunes, 12 de julio de 2010

Entre fantasmas

Llegar a la ciudad pasadas las diez de la noche y, en lugar de encontrar el bullicio propio de la principal avenida, descubrir que sólo pocas almas viven ajenas al fútbol.

Pasar por delante de todos los bares del barrio y ser incapaz de ver cuál es el resultado provisional, porque el gran número de personas agolpadas en la puerta no te dejan ver ni un milímetro de pantalla.

Seguir andando en dirección al dulce hogar pasando todos los bares que están cerrados porque no tienen pantalla de televisión, y no vale la pena pagar al personal por una noche tan improductiva.

Descubrir que un bar con una pantalla gigante delante de una plaza, siempre se puede convertir en un lugar de encuentro para más de cien personas.

Encontrar embobado delante de una pantalla - donde se escucha la retransmisión que sólo el fútbol puede generar- al paquistaní que vende pastas típicas de su país. No cierra el local, porque debe de ir en contra de su visión de negocio, pero estoy segura de que si entras a pedir algo será incapaz de atenderte porque no se puede poner la atención en dos cosas a la vez.

Finalmente, llegar a casa agotado tras un viaje de más de seis horas y encender la televisión. Quitar el volumen, porque es insoportable escuchar lo que dicen. Volver a ponerlo, porque en silencio es mucho más aburrido. Finalmente, celebrar el gol como si en ello nos fuera la vida, gritar, sonreir, abrazarnos y prácticamente saltar de alegría.

Dejar la celebración para los demás y coger la cama odiando a todos aquellos que esta noche han descubierto que tienen un cláxon en el coche o en la moto, a todos los que no saben celebrar las alegrías sin molestar a los demás, a los que no saben festejar una victoria sin romper, quemar o pintar. Y entonces, a pesar de lo mucho que has celebrado el gol, y de saber lo mucho que se lo merece el equipo, pensar "ojalá hubieran perdido".

Aún así, fue de lo más interesante vivir la sensación de no saber cómo iba el partido, no saber quién ganaba o quién perdía, mientras todo el mundo a tu alrededor está atento únicamente a eso.

jueves, 17 de junio de 2010

La culpa es negra y nadie la quiere

Cuando se separaron los Beatles se culpabilizó de ello a Yoko Ono.

Se supone que las mujeres desestabilizan a los hombres, les hacen dejar a sus amigos, son malas malísimas, les obligan a comer sano, a no beber cerveza, les miran mal cuando ven el fútbol, odian a sus madres, van en pareja al lavabo, hablan todo el tiempo, les riñen si les cae una gota de agua al suelo, gritan y lloran cuando tienen la regla, dicen frases como "nunca me sacas" o "es que nunca me escuchas", no soportan que ellos tengan amigas, utilizan todos los cacharros que hay en la cocina para hacer una simple cena, se enfadan si ellos olvidan el día de su aniversario y un largo etcétera que por una cuestión de tiempo y espacio, obviaré.

En definitiva: se supone que las mujeres dominan a los hombres. Por eso si los Beatles se separaron, fue por culpa de Yoko Ono.

De ahí una frase que se popularizó en este país que decía "la culpa de todo, la tiene Yoko Ono" con cantarilla de manifestación multitudinaria.

Alguna vez la uso, pero creo que se ha quedado obsoleta, porque la juventud actual no sabe quién es Yoko Ono. Así que, después de leer lo que dice la prensa deportiva nacional e internacional de hoy, propongo la siguiente frase en sustitución de aquella:

"la culpa del cero, la tiene Carbonero"

Cuajará???

martes, 15 de junio de 2010

Miscelánea

Veo las noticias desayunando y luego cojo la moto para ir a trabajar. Sólo eso da para muchas publicaciones en el blog, pero lo dejaremos sólo en esta con tres temas:

1. El alcalde de Barcelona aprueba un decreto de alcaldía para prohibir que las mujeres con burka o niqab estén en dependencias públicas. La calle, que yo sepa, es pública pero ya entiendo que no se refieren a eso nuestros gobernantes. Está prohibido que mujes ataviadas en tales vestimentas accedan a mercados municipales, centros cívicos, hospitales, etc.
Esto me plantea dos preguntas:

A: Por qué no prohibimos que las personas desnudas accedan a espacios públicos? Vale, sí, quizá hayamos visto sólo a dos personas en toda la vida en pelotas por la calle. Pero oye, por qué no hacer una ley para dos personas, si ahora la han hecho para tres?

B: Si una mujer con burka entra en un hospital, la echarán? Si la mayoría de mujeres que visten así (si es que hay una mayoría en un número tan reducido de personas) utilizan habitualmente los servicios públicos de salud, ¿no las estamos condenando a dejar de ir al médico? ¿no las condenamos a que dejen de hacer la poca vida social que hacen ahora? ¿no les obligamos a quedarse en casa?

Es eso lo que queremos. Que las mujeres con burka no estén en nuestras calles porque no nos gusta verlas. No es que no nos guste que vistan así, lo que no queremos es que manchen nuestra visión idílica de una Barcelona moderna y guay.

2. Unos psiquiatras en Barcelona dicen que pueden curar la homosexualidad. El tío empieza bien la entrevista explicando que muchas personas homosexuales tienen problemas de aceptación que generan problemas de salud mental. Son enfermos. No me parece extremadamente exagerado, ya que supongo que habrá personas bajas que les pase lo mismo, o personas demasiado altas, o personas gordas, o personas delgadas...
Pero el quid de la cuestión está en que el tal psiquiatra utiliza un método cuyo objetivo no es superar la falta de aceptación y aprender a vivir a gusto con lo que eres y como eres. No. El tal psiquiatra lo que hace es "curar" la homosexualidad.
¿alguien cree que ser homosexual, en sí mismo, es una enfermedad? ¿alguien cree que por ir a un psiquiatra y dejar de tener una pulsión sexual hacia las personas de tu mismo sexo (si es que esa terapia consigue algo similar a eso) vas a ser una persona sana? Y si alguien lo cree, no me parece mal que lo crea, pero no me parece ético que un médico aproveche su posición para vender un discurso homófobo de tan bajo nivel.

3. Al llegar a la moto veo que la que estaba aparcada al lado de la mía tiene las llaves puestas. Las cojo y entro en la tienda más cercana.

- Mira, la moto esta negra tenía las llaves puestas. Te las dejo aquí y le ponemos una nota de que las tienes tú.
- Las llaves tuyas? no moto yo.
- No, no. Mira. Esa moto negra. La ves?
- Sí.
- Tenía las llaves puestas. Se las han dejado puestas. Alguien se ha olvidado las llaves en la moto. Vale?
- Sí.
- Yo te dejo las llaves y le pongo una nota a la moto para que vengan a buscarlas aquí.
- Yo no llaves. Si tú sí. Llaves tuyas luego alguien.
- Da igual. Déjalo.

Así que he ido al bar de la esquina, que estaba un poco más lejos. Me he ido con la esperanza de que el dueño de la moto vea la nota y que entienda las indicaciones, porque el maldito bar no tenía ni rótulo con nombre!
A mi no me importa que el propietario de la frutería no entienda nada de castellano. De catalán ya ni hablamos. Pero lo que sí me parece una falta absoluta de respeto es que no tenga ningún interés en aprenderlo. Para montarse un negocio estoy segura de que no lleva aquí un mes, ni dos. Así que, un poco de interés por la gente con la que convives!!!

jueves, 10 de junio de 2010

De perlas

No me gustan nada los pendientes de perlas. Ya sé que a Susie sí, pero ella tiene mucho más estilo que yo, no es comparable lo que puede ponerse una y la otra.
La cuestión es que les cogí manía a estos pendientes en mi época universitaria en que todas las chicas parecían calcos las una de las otras, con el pelo liso, rubio, y pendientes de perlas.

Pero perlas, las hay de muchos tipos y colores. Famosa es aquella frase de "perdona, pero los collares de perlas se dejaron de llevar en 2003"

A mi, más que las perlas, me gustan los perlas. Que de esos, hay mucho por mi barrio.

Luego están las perlas que sueltas algunos políticos. La última gran perla que he escuchado fue en boca de Jordi Pujol que tildó a Aznar de "nuevo rico" por intentar humillar a Schröder mientras que según el ex-president el Sr. Zapatero es un "nuevo rico ignorante".

Y luego, sin extenderme demasiado, tenemos la perla negra de Jack Sparrow, la perla gris, la madreperla, las perlas medicinales, las que pesca el pescador, la joven de la perla, una estación Dharma en una isla "perdida" en el pacífico, el arroz perla, etcétera, etcétera.

Así que, a partir de ahora, me lo pensaré dos veces antes de decir aquello de "no me gustan las perlas".

miércoles, 2 de junio de 2010

Con la iglesia hemos topado

El otro día discutía con Gorka sobre lo progre que es no escandalizarse cuando se critica a la iglesia católica, pero llevarse las manos a la cabeza cuando se ataca a la comunidad musulmana como tal. Decía Gorka que en este país se puede decir cualquier cosa de la iglesia católica, pero queda mal meterse con el islam.

Yo no estaba de acuerdo, pero debo reconocer que se dedican más minutos de humor a unos que a otros. Si bien es cierto que existen gags sobre musulmanes que me hacen la misma gracia que los que se emiten sobre los católicos.

La cuestión es que hoy he leído que se había abierto juicio oral contra Javier Krahe por un vídeo en el que explica cómo cocinar un cristo. Parece ser que el vídeo se gravó en 1974 y en él unas manos separan la figura de Cristo de un crucifijo, lo meten en el horno y en tres días (dice la voz en off) sale solo. Pues allá por 2004 estando Krahe en "Lo + plus" emitieron este vídeo (dice la productora que no lo emitieron, pero se veía en las pantallas que había detrás del invitado) y la comunidad católica se llevó las manos a la cabeza y se iniciaron diligencias penales.

Os adjunto el link de la información que nos da la Cope http://www.cope.es/religion/20-05-10--apertura-juicio-oral-javier-krahe-por-cocinar-un-crucifijo-171366-1 en que lo califican de blasfemo. Los comentarios son de todos los colores, desde cristianos que piden la resurrección de Torquemada para enviarlo a la hoguera, otros que le insultan, otros que piden que se le perdone (como buenos cristianos), etcétera. Como vereis, en toda la noticia no se dice en ningún sitio que el vídeo es de hace más de treinta años.

En Público nos ofrecen la misma noticia, http://www.publico.es/espana/314232/pertura/juicio/oral/cantante/javier/krahe/delito/sentimientos/religiosos/centro/juridico/tomas/moro/vuelve/triunfar/defensa/libertad/religiosa
con una explicación un poco más extensa de detalles como la fecha de grabación del vídeo y los comentarios del propio Krahe así como de la productora del programa.

Y por último quería adjuntar el link de una noticia sobre las caricaturas de Mahoma publicadas en la Cope http://www.cope.es/mundo/08-01-10--vuelven-publicar-caricaturas-mahoma-tras-agresion-su-autor-123087-1 en que el cuerpo de la noticia es bastante neutro, pero lo que no tiene desperdicio son los comentarios de los lectores.

Amigo Gorka, si me lees, el mismo doble rasero que aplican unos, lo aplican los otros. Con la diferencia que unos por ser nacionales (como si no hubiera musulmanes españoles) se creen con mayor derecho a que sean respetados sus sentimientos religiosos.

Y a mi, personalmente, me parece igual de indignante que se procese a Javier Krahe por esto, como me pareció indignante que se procesara a un periódico por publicar caricaturas de Mahoma. Señores, yo no creo en Dios y no me ofende lo más mínimo que desde la Iglesia, desde la radio, o desde donde sea, se rían de mi opción y consideren que estoy equivocada. Y si publicaran un cómic sobre el ateo estúpido me parecería estupendo porque yo sé que no soy estúpida. Y si me obligaran a llevar una colgante con una cruz, o un burka, me parecería igual de horrible que si me prohibieran hacerlo.

lunes, 31 de mayo de 2010

Le voyeur

Existen ocasiones en las que la mirada se nos escapa a pesar de que nuestro cerebro advierta de la inconveniencia de observar aquello.
Aquello que miramos capta todos nuestros sentidos, lo miramos con los ojos y también con los oídos. Observamos de una manera totalmente activa algo, aún sabiendo que en el segundo después de que haya finalizado el espectáculo nos arrepentiremos de haberlo visto.

Un ejemplo claro de este tipo de situaciones se da cuanto vemos un documental sobre circuncisiones practicadas en la selva; un documental sobre la alimentación en determinados lugares también selváticos del extremo oriente; un programa de adultos estúpidos que se dan patadas en los testículos en una biblioteca con el reto de no emitir ningún sonido; un debate en el que participe la Esteban; etc.

Pero en el top 5 de cosas que en realidad no queremos ver, pero siempre acabamos viendo porque somo incapaces de no sucumbir al morbo están:

En el número 5: Un robo. Ves la cara de quinqui del autor del hurto, ves a la víctima, quieres evitarlo pero no sabes cómo y sólo puedes mirar cómo se van sucediendo los hechos. Y luego te arrepientes de haberte quedado mirando y no haber hecho nada. Es horrible!

En el número 4:Un borracho a punto de caerse. Tu instinto de buena persona te obligaría a ayudarle en una situación así, pero no sólo no le ayudas sino que te quedas ahí esperando a ver cuándo se la mete. Tengo que decir que esto me pasó el otro día, a plena luz, con un hombre muy perjudicado que intentaba subir a una bici. Lastimica.

En el número 3: Alguien meando en la calle. Tú, que eres pudoroso, prefieres que el tema de la micción lo lleve cada uno lo mejor que pueda en la intimidad de un baño. Pero cuando ves a alguien apoyado contra una pared, o contra un contenedor dándose el gustazo de mear en mitad de la vía pública, no puedes evitar mirarle. Y le miras, pero durante todo el proceso estás esperando que no haga un gesto brusco que coloque su miembro viril en tu campo de visión. Si esto sucede el arrepentimiento por haberte quedado mirando, nunca será el suficiente.

En el número 2: Un chulo playa. Tú sabes que no debes mirarle porque eso implicará que piense que ha triunfado. Pero no puedes evitarlo. Con esa cadena de oro. Con ese bañador apretado. Con ese moreno de UVA. Con esa depilación en los brazos y en las piernas. Con ese movimiento al andar, que a cualquiera le preguntarías si está bien, pero a él no porque sabes que es un chulo-playa. Y lo peor es que no puedes evitar escuchar cuando intenta ligar con la chica mona que toma el sol en la toalla de delante a la tuya. No puedes evitar ver cómo se fragua el fracaso público de nuestro protagonista.

En el número 1: Sin lugar a dudas, en el primer puesto sólo podía estar la gala de Eurovisión, los comentarios de Uribarri, las votaciones de los países y las falsas sonrisas de los perdedores cuando ya se saben perdedores. Al acabar los pocos o muchos minutos que hayas aguantado semejante tostón, apagas la tele y te quedas mirándola como si te hubiera robado el alma. Siempre te repites que el año que viene no la verás, pero aunque sólo sean las votaciones, vuelven a minar tu fuerza de voluntad.

jueves, 20 de mayo de 2010

Talón de Aquiles

Me gusta recordar cuando era una niña y jugaba ajena a los peligros en calles sucias con jeringuillas por doquier. Cuando era adolescente y reír con mis amigas era, sin lugar a dudas, la mejor forma de pasar el tiempo. Cuando era más joven y organizaba mi vida social en función de dónde y cuándo se leyera poesía. Cuando hace pocos años el reto era encontrar el momento adecuado para cada persona.
Y siempre que me recuerdo, hace mucho o hace menos tiempo, sé que en cada momento tenía mi pequeño talón de Aquiles.
Ese talón de Aquiles podía ser real, o ficticio. Podía conocerle o no. Podía haberle hablado o sólo verlo cada cierto tiempo.
En el Instituto descubrí por qué, a esos talones de Aquiles, se les llamaba platónicos. Y también descubrí que uno te podía durar los cuatro años que van desde primero de BUP hasta COU.
Pero para mí eran mi Talón de Aquiles porque nunca sabía qué decirles. No sabía evitar que mi fortaleza cayera y mi cara dibujara una estúpida sonrisa al ver sus caras entre la gente.
No podría nombrarlos a todos en este post, pero hoy me he acordado de todos ellos. Me he acordado porque al cerrar la página de correo he visto la foto de uno de ellos y mi cara se ha iluminado a pesar de las montañas de trabajo que hay sobre mi mesa.
Y me he vuelto a sentir una niña, una adolescente enamorada del amor. He vuelto a pensar en todos los que ocuparon ese mismo puesto y debo reconocer que el de la foto de hoy es el más antiguo, continuo y perenne de todos mis Talones de Aquiles.

lunes, 3 de mayo de 2010

Luchando contra KLM

Qué alegría y que acojone te invade cuando te acabas de gastar más de dos sueldos en unos billetes de avión. La alegría es porque el viaje se va materializando, y el acojone porque si pasara algo de aquí a la fecha prevista de despegue, adiós a la pasta.

La emoción del momento hizo que viera el e-mail de confirmación como la salvación, pero repasándolo un par de meses después, vi que era sólo un e-mail de confirmación. El propio e-mail te indica que en varias horas te enviarán los billetes electrónicos, y que si no los recibes te pongas en contacto con ellos.

Cuando me di cuenta de que no tenía los billetes la histeria se apoderó de mi. Llamé al más calmado de mis compañeros de viaje (más calmado porque tiene un trabajo en el que estresarse es ir contra natura). Me habló como si él tuviera la verdad en la palma de la mano y yo le estuviera diciendo que el fin del mundo se acerca "tranquila, si tenemos la confirmación con eso ya vale". A pesar de su calma, decidí ponerme en contacto con KLM.

El primer problema vino porque todo esto pasó la semana en que el tráfico aéreo se paralizó a causa de la nube de cenizas del volcán Eyjafjalla. Imposible contactar con una compañía aérea. Susie envió un mail pero por lo que parece han pasado de contestarle.

Esperé una semana y busqué entre las entrañas de google cualquier teléfono de información que no fueran los dos que ya tenía y en los que nadie contestaba jamás.

Finalmente conseguí que la maquinita me atendiera: Para reservas realizadas por internet pulse 2. Pulso 2. Musiquita. Sentimos comunicarle que en estos momentos no hay ningún teleoperador que pueda atenderle (y aquí yo pensaba que me iban a decir que llamara en unos minutos, pero no!) en español, remitiremos su llamada al primer operador que se libere quien le atenderá en inglés.

Decidí colgar el teléfono. Porque ya me hubiera costado explicarle que quizá soy una paranoica pero que no tengo los billetes, en castellano, imagínate en inglés.

Tras todas las averiguaciones del mundo he descubierto que las oficinas están relativamente cerca del despacho. Si hoy no consigo arreglarlo por teléfono, ahí que me planto!

lunes, 26 de abril de 2010

Crónica negra de un día rosa

Hay días que tiene un encanto especial. Sant Jordi es uno de esos días. Una camina por la calle, repleta de usurpadores de floristas dispuestos a poner color a un día laborable como cualquier otro.
Uno sonríe en Sant Jordi, al bajar de casa y descubrir en la primera esquina la primera parada de flores, y diez metros más allá otra, y otra, y otra....
Pero no todo es de color de rosa. Por un lado está mi amiga, la que siempre sufre las relaciones porque nunca le llegan hasta Sant Jordi, y cuando rompe con ellos en Febrero me llama y me dice "Nena, otro año sin rosa para Sant Jordi". Para ella las relaciones están entre el Sant Jordi de un año y el del siguiente. Y se lamenta de no conseguir que le lleguen hasta la esperada fecha en que, aunque sea porque toca, le traigan una rosa tan bonita como esperada.
Por otro lado están los vendedores de flores, que no floristas, que un día como Sant Jordi deciden ir al mercado, cargar de rosas algún vehículo improvisado, y venderlo para subvencionar el viaje de fin de curso, uns vuelta al mundo en bicicleta, una ayuda para Chile, etc. Estos tienen unos permisos que concede el Ayuntamiento y se colocan exactamente delante del número que se les otorga de la calle que les haya tocado en gracia. Hasta aquí parece todo normal, pero si paseais por la ciudad a primera hora de la mañana, cuando se están montando las paradas, vereis como unos increpan a otros "aquí no te puedes poner que estás demasiado cerca" o bien "oye, que tú tienes el número 22 y el 22 está cinco metro más para allá".
Y por último, los olvidados, los comerciantes del libro y la rosa que en un día como Sant Jordi se forran pero a costa de dejarse cinco años de vida en cada 23 de Abril. Los floristas, los de verdad, tienen que decidir días antes cuántas rosas comprarán, de qué tipo, a qué precio venderlas, a cuánta gente contratar para ese día, etc. Y si a última hora del día ven que el número de rosas que les queda es muy superior al que esperaban, tienen que empezar a bajar precios, hasta el límite mínimo de "cubrir gastos". Y mientras, tienen que ver cómo el grupo de adolescentes que está una esquina más allá vende más rosas que ellos porque están mucho más baratas.
¿Qué decir de los libreros? el volumen de público que acuede a las librerías es tan elevado que estoy segura de que es el día del año que más libros pasan por la puerta sin que se haya abonado previamente su importe. Tienen que contratar personal, organizar mesas en las que envolver regalos, apostar por los best sellers, intentar que algún escritor venga a firmar libros media horita en todo el día, y no parar de trabajar desde semanas antes, hasta la noche del día 23.

La ciudad está preciosa, el ambiente invita a pasear y disfrutar de las rosas y la cultura, pero todo esto es gracias a tanta y tanta gente que sufre lo que nosotros disfrutamos que este quería ser mi pequeño homenaje a todos ellos.

jueves, 15 de abril de 2010

Resignarse o morir

Cuando una vive en un barrio teóricamente conflictivo, siempre tienes alguna anécdota para explicar: "pues el otro día en el súper...." "resulta que iba por la rambla...."

Este barrio, además de conflictivo, también es una zona de ocio. Eso implica que la gente sale por la noche, se emborracha, la lía, hace ruido, mea, grita, rompe vasos y botellas por la calle, y luego se van a sus barrios tranquilos a dormirla.

El viernes por la noche salí con un grupo de gente. Estábamos parados frente a un bar, cuando un vecino salió por la ventana y nos increpó en un idioma que nosotros desconocíamos, pero era evidente que se quejaba del ruido que producíamos al hablar a esas horas en mitad de la calle. A parte de algún comentario racista, que me niego a reproducir, alguien dijo "pues si no te gusta, vete a vivir a otro barrio"

Ayer había un debate en la televisión sobre la delincuencia. Uno de los contertulios consideraba que ir al Liceo cargado de joyas es provocar para que te roben. Si vas al raval, vete sin dinero, y así no tendrás problemas. Más o menos, esta era la idea.

Osea, señores, que debemos conformarnos con lo que hay. Si vives en el raval no te quejes del ruido que provocan los borrachos en tu calle, porque vives en el raval. Si vives en el raval, no te compres joyas caras, porque no las vas a poder sacar de casa. Si vives en el raval, no puedes quejarte de las calles con olor a orín humano, de la suciedad en los contenedores, etc.

La única conclusión lógica es pensar que los que viven en el raval, o son masocas, o son tontos. O quizá, a alguien no se le ha ocurrido, pero podría ser que uno viva en el raval porque ahí se lo puede permitir y en el eixample no; puede que alguien viva en el raval porque vivía allí antes de que fuera una zona de ocio y a su edad le sea imposible cambiar de barrio; puede que algunos vivan en el raval porque les gustan las cosas positivas y creen que se pueden mejorar las negativas. Ilusos ellos que no saben que aquí sólo nos podemos conformar, y no pretender mejorar las condiciones de vida de nadie.

El barrio ya es digno, pero también es mejorable.

jueves, 8 de abril de 2010

Qué rabia!!!!

Ayer fui a tomar algo a un bar normal de una buena zona de la ciudad. Cuando salimos del bar, mi acompañante se dio cuenta de que le faltaba el móvil. Volvimos dentro, lo buscamos, pero después de desmantelar el bolso tres veces, llegamos a la conclusión de que se lo habían robado.

Por qué me dio rabia? primero porque eso implica llamar, darlo de baja, ir a buscar otro móvil y otra tarjeta, perder las fotos que pudiera haber, etc. Pero también me dio rabia porque no me di ni cuenta. Se te queda una extraña sensación de que eres tonto, cuando lo cierto es que son el resto los que son muy listos.

Cuando te pasa algo así, y que conste que a mi no me han robado nunca (si me robaran, creo que me pondría a llorar!!!), no paras de darle vueltas a lo que hubiera pasado si.... Si me hubiera dado cuenta, si nos hubieramos sentado en otra mesa, si hubiera puesto el móvil encima de la mesa....

En fin, hoy estoy más tranqui, pero ayer me dio mucha, mucha rabia. Putos amantes de lo ajeno!!!!

viernes, 19 de marzo de 2010

Más vale malo conocido...

Se recomienda a las parejas con hijos que se tomen un descanso de niños un día a la semana. Para ello es ideal salir a cenar en pareja, descansar de gritos, óredenes y quejas, y pasar una velada tranquila.
Nosotros hace tiempo decidimos no esperar a tener hijos para tomarnos ese día, y los jueves intentamos salir a cenar.
Es el día ideal para probar cosas nuevas, restaurantes nuevos, propuestas diferentes, etc. Por suerte, en el barrio donde vivimos la oferta de ocio es lo suficientemente amplia como para tener restaurantes donde elegir.
Hay un restaurante por donde pasábamos siempre pero nunca habíamos pensado en entrar. Y finalmente, ayer, entramos.
Es un lugar muy agradable, con una decoración detallista y, para mi gusto, muy bonita. Pedimos, para picar, pulpo con un puré líquido de patatas. Puede parecer asquerosito, dicho así, pero estaba delicioso. El camarero nos propuso acompañar el pulpo con pan con tomate, le hicimos caso, pero resultó ser una mala elección (para acompañar el líquido de puré de patata, hubiera sido mejor el pan sin tomate)
Yo elegí la hamburguesa de ciervo, y mi compañero gastronómico eligió los raviolis rellenos de salmón ahumado.
Tras esperar unos diez minutos entre el primero y el plato principal, aparecieron los platos. Primera decepción: en el plato había tres raviolis. Pero no exagero, eran TRES raviolis. Parece ser que estaban buenos, yo no me atreví a probarlos, porque hubiera supuesto comerme un tercio del plato. Sin embargo la salsa que lo acompañaba, y cito literalmente "parece de sobre".
Segunda decepción: la hamburguesa costaba trece euros, y una espera que le pongan una hamburguesa con un poco de verdura al lado, o un poco de esalada, o un poco de algo. Lo que no se espera una es que le pongan una hamburguesa sola, con una rebanada de pan con tomate.
La hamburguesa no llevaba ni un poco de cebolla de acompañamiento, ni una salsita, ni nada. Una hamburguesa y un trozo de pan. Hasta en el McDonald's se curran un poco más los acompañamientos.
De postre nos decidimos por un "milhojas de brownie y mascarpone" que, evidentemente, resultó ser un tiramisú. Delicioso.

Resultado: 51,15 euros. Un robo, vamos!

miércoles, 17 de marzo de 2010

Sólo hay una

Una chica metida en una relación insana. Insultos, discusiones, poco amor, engaños... Una relación que dura ya demasiado. Me dan ganas de cogerla por los hombros, zarandearla y hacerle ver que sólo tenemos una vida, ella tiene 26 años y ha perdido los últimos tres al lado de la persona equivocada. Me dan ganas de abrirle los ojos y enseñarle que no puede seguir perdiendo el tiempo de esta manera porque el tiempo nunca se recupera.

Salgo de clase a las nueve de la noche y una patrulla de la guardia urbana está junto a un extranjero que está sentado en la acera, sucio, magullado, drogado. Le dicen que se esté quieto, que han llamado a una ambulancia. Me fijo y tiene la mano izquierda sangrando.
La mañana, siguiente voy en la moto y veo al mismo hombre, con la mano izquierda vendada y en la derecha tiene una bolsa semitransparente con un líquido en su interior. Acerca la boca y la nariz a la apertura de la bolsa e inspira fuertemente. A su lado veo una lata de disolvente. Y mientras me alejo pienso "por qué le dejamos hacer eso?". Me dan ganas de bajar de la moto, secuestrarlo y dejarlo encerrado en una casa de campo con comida y bebida hasta que no quede ni rastro de droga en su organismo. Me dan ganas de decirle que es joven, y la vida puede traerle cosas bellas si tiene los ojos abiertos para verlas.

Hay tantas formas de ser infeliz...

miércoles, 10 de marzo de 2010

Oficialidad

Transcribo una conversación real que he tenido hoy con una amiga:

- Ella le dijo que no lo quería compartir con nadie. Que aunque hace poco que se conocen, no quiere que sea un rollo y ya está, sino algo serio. Él le dijo que se lo pensaría.
- Y qué...????
- Pues que se lo pensó y le dijo que ahora no quería una relación seria, pero que con ella sentía algo especial y que... bueno, vale, que sí. Y se han puesto en el facebook que están en una relación el uno con el otro.

lunes, 8 de marzo de 2010

El uso secreto de las palabras

Supongo que es normal creer que uno siempre tiene la razón. Supongo que es igual de normal considerar que la opción que toma uno en la vida es la correcta. Del mismo modo, supongo que es habitual creer que si todo el mundo pensara como uno piensa, las cosas irían mejor.

Tras ocho años de gobierno popular, múltiples manifestaciones, movilizaciones de todo tipo, ocupación de la vía pública, etcétera; las iniciativas legislativas, aunque no me satisfagan totalmente, no provocan un rechazo frontal en la mayoría de ocasiones (esperaré a la nueva reforma laboral, a ver cómo nos sorprende el amigo zapatitos)

Actualmente, y desde hace unos años, los que se manifiestan suelen ser votantes de derechas. Debo reconocer que organizan muy bien las movilizaciones y las manifestaciones. Y además, saben utilizar muy bien las palabras adecuadas. Nosotros íbamos con un "no a la guerra" o con un "aquesta és la seva democràcia", o gritábamos por la igualdad entre gays y heterosexuales (aún sabiendo que no somos iguales, y cada persona tiene unas necesidades determinadas a cubrir). Gritamos "No al trasvasement" y también aquello de "nunca mais". Pero si os fijais, todas las consignas era negativas.

Ellos van a una manifestación en contra de la ley del aborto y lo hacen por la vida. Quién les puede recriminar que estén haciendo algo malo, con semejante valor a defender? las mujeres pro-abortistas hablan del derecho de la mujer. Qué argumento más débil ante la palabra "vida". Ellos se manifiestan por la familia. Y entonces, qué homosexual tendrá narices de anteponer a eso su derecho a la igualdad? si la familia es la base de toda civilización...

Nosotros grítabamos no...a la guerra... a las desigualdades... a los planes hidrológicos... al G-8. Y ellos gritan sí. Hoy leía un post donde decía que los otros siempre se apoderan de las palabras buenas (vida, familia, cultura- en el tema de los toros-) y nosotros siempre nos tenemos que conformar con las que quedan.

País!!!

lunes, 1 de marzo de 2010

Calzándonos

Lunes después de un fin de semana intenso. Miro en el facebook y mi compañero de curro ha colgado unas fotos a las que titula "calçotada".

La "calçotada" consistió en irse con su novia a un restaurante, y comer calçots con babero. Total: 20 calçots.

Si en lugar de comer calçots hubiera comido costillas de cordero, o carne en general, no creo que lo hubiera denominado "parrillada". Y si en lugar de eso, hubiera comido hamburguesas, lo habría llamado "barbacoa"?

Si es que está de moda esto de las calçotadas y el turismo agropecuario. Pero eso sí, siempre manteniendo el toque chic en cada movimiento!

PD. Nuestros 750 calçots de ayer sí que fueron una calçotada!

martes, 23 de febrero de 2010

¡A comer!

Hace ya algunas semanas que frecuento el mismo bar para comer el martes al mediodía. Hace ya algunas semanas que vi a dos señores de unos setenta y tantos años comiendo juntos. Cada martes están allí.
Van bien vestidos (traje y corbata), se colocan la servilleta a modo de babero para no mancharse, comen, se miran de vez en cuando, a veces hablan con la camarera. El otro día me senté en la mesa que había vacía a su lado. Yo como sola, así que la poca distracción que tengo es mirar a mi alrededor y observar. Durante toda la comida se dirigieron un total de cuatro frases el uno al otro.
Y entonces mi imaginación se dispara... son hermanos o amigos, y quedan todos los martes para comer juntos. Lo hacen porque es una tradición desde hace 20 años, cuando ambos eran abogados en activo (lo de abogados lo digo porque el bar está cerca de los juzgados) y ahora ya no tienen pleitos para explicarse, ni amantes de las que alardear.
O quizás sean dos funcionarios de la Generalitat (también hay cerca un edificio de la Generalitat) de esos que no quieren jubilarse nunca, que se pasan el día juntos desde hace más de veinte años. Y comen juntos porque así se sienten acompañados, pero con el paso de los años se conocen tanto que ya no tienen nada más para explicarse.
O quizás son espias que se sientan y se mantienen callados porque están investigando a alguna de las múltiples personas que cada martes comen en este bar. Su silencio se debe a que así pueden oír mejor lo que pasa a su alrededor, pero en realidad se morirían de ganas de poder tener una conversación estúpida y trivial.
O quizás esto de comer sola no acabe de ser una buena idea, porque mi mente vuela, vuela, vuela, y en una de estas se estampará contra el techo de la sala.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Propiedad privada

El lunes fue uno de aquellos pocos días al año en que no iba motorizada. Esos días me ayudan a observar mejor el ambiente, notar el latido de la ciudad y fijarme en ciudadanos anónimos de los que te cruzas por la calle. Esta fue mi observación:

Había un señor de unos 50 años, tomando un café con leche en un bar. Era indigente, se veía claramente por sus ropas, el gorro de lana, la barba descuidada, y las capas y capas de ropa que vestía. Era el único cliente del bar, y me sorprendió gratamente que le hubieran dejado sentarse en una mesa.

A pesar de estar sentado en una mesa tranquila de un bar con grandes ventanales, parecía inquieto por algo. Se le veía preocupado, y miraba continuamente hacia algo que estaba en la calle. Siguiendo la dirección de su mirada descubrí el objeto de sus deseos e inquietudes: había un carro del supermercado repleto de objetos (ropa, mantas, platos sucios, trozos de hierros, muñecos, zapatos, etc.) sucios y viejos.

Entonces entendí el motivo de su angustia. Él sabe que en Barcelona no puedes dejar absolutamente nada de valor sin vigilar en la calle, y lo que le preocupaba es que mientras tomaba el café tranquilamente en un bar, algún chorizo de poca monta le robara sus propiedades.

viernes, 22 de enero de 2010

Nou de trinca

En los trabajos se aprende por la experiencia más que por los conocimientos previos. En cada sitio las cosas funcionan de una manera determinada, y no te integras totalmente hasta que conoces los entresijos más recónditos de cada una de las tareas que se te pueden encomendar.

Ahora tenemos chica nueva en la oficina y todos nos vemos con el derecho de opinar. Incluso la que hasta el momento era la nueva. Ahora todos estamos en condiciones de igualdad excepto ella, que es la última en llegar, y eso coloca a la que estaba antes en su lugar en una posición privilegiada. Cuando habla de ella lo hace como dejando caer un "yo sé de qué va todo, y ella no"


La peor posición en un trabajo es la de "nuevo". No sabes la relación entre el resto de trabajadores, no conoces el carácter de los demás, no sabes lo que es más importante y lo que lo es menos, no entiendes las bromas internas, te sientes perdido y además sabes que todos controlan tus acciones.

En definitiva, para evitar ser la nueva, creo que me quedaré calentando la silla que tengo ahora mismo debajo del culo.

lunes, 11 de enero de 2010

Muerte por la digestión de un sofá

Día de Reyes: Me despierto y voy al sofá. Me duermo en el sofá. Me despierto y me ducho. Me pongo un pijama limpio y me tiro en el sofá a ver la tele (sólo ofrecen mierda). Hago la comida, como y me echo al sofá. Jugamos tres partidas de ajedrez en el sofá. Nos levantamos del sofá y jugamos un trivial. Hago la cena, ceno, y al sofá a descansar un poco.

viernes, 8 de enero de 2010

Grandes misterios de la naturaleza II

Si las previsiones meteorológicas aseguraban que hoy iba a nevar, y no nieva, es porque:

A. Es deporte nacional decir aquello de que "el hombre del tiempo siempre se equivoca"
B. Llevo toda la semana moviéndome en moto y mojándome porque llovía. Y hoy, ante la previsión de nieve, he dejado la moto en casa, he venido andando, y ni siquiera llueve.

lunes, 4 de enero de 2010

Insistentemente

Hace días recibí una solicitud de amistad por facebook. Presioné aquella bonita palabra: "ignorar".
Cuando accedí a la página principal vi que tenía un mensaje de la misma persona a quien acababa de "ignorar". Lo abrí, leí que es un primo de un hermano lejano de una prima hermana de mi padre, o algo por el estilo.
Ahora, sabiendo quién era, me alegraba aún más de haberle ignorado, porque yo no tengo facebook para hacer amigos, sino para comunicarme con los míos.
Al día siguiente, al abrir la página volvía a tener una solicitud de amistad, y un nuevo mensaje. Esta vez atacó por dos flancos y no sólo tenía una solicitud, sino dos. La otra era de una mujer que supuse que es su hermana.
De nuevo el "ignorar" y leer los mensajes sin contestar.
Esta mañana, no me lo podía creer, pero por tercera vez "solicitud de amistad". Lo peor es que yo pensaba que los que no son mis amigos, no me podían ver en facebook, y ahora que mi seguridad en ese punto ha vacilado, me siento vulnerable ante la red.
Por tercera vez, he ignorado y he leído el mensaje. Ahora me pregunto, ¿hasta cuándo? ¿le debería enviar un mensaje diciéndole que no quiero ser su amiga de facebook porque no le conozco?¿debería seguir ignorándole?