jueves, 23 de abril de 2009

Thinking about...

Los humanos tenemos una capacidad especial para comernos la olla, y aún a riesgo de sonar machista, entre los humanos, las mujeres trabajamos más este aspecto que los hombres.
Los ejemplos claros de comida de olla son mucho, pero a mi, ahora mismo se me ocurren los siguientes:

1. Tu novio se olvida de vuestro aniversario. Esto es una tragedia, porque eso significa que la relación no le interesa. Quizás esté contigo sólo por estar con alguien, pero en realidad ni te quiere ni nada, es un mero trámite. Con lo importante que es él para ti, y sin embargo, tú para él.... no eres nada. Esta es la conclusión a la que llega alguien que se come mucho la olla. En caso contrario, iría a su novio y le diría "eres un pájaro, no te acuerdas de que hoy es nuestro aniversario" y ya está.

2. Resulta que hay un chico súper simpatico, que te hace bromas. El otro día te regaló un libro súper interesante. A veces te envía mails, sólo por saber cómo estás (como haría cualquier amiga). Tú podrías pensar que sencillamente se debe a que es simpático, pero no. Eso sería no comerse la olla, empiezas a pensar si te gusta o no te gusta. Si la conclusión es que te gusta, de ahora en adelante no podrás llevar esa relación con normalidad, cualquier pequeño detalle, una mirada, una broma, cualquier cosa, significará mucho más de lo que él piensa. Si la conclusión es que no te gusta, empiezas a rechazar sus llamadas, no le contestas los mails, etc. Eso lo haces para que no se confunda, y no piensas que la que está confundida, posiblemente seas tú.

3. Y la última comida de olla típica, que surge de la nada, pero se convierte en el todo es: mi amiga/o está rara/o. Esto puede pasar por muchas cosas, pero la cuestión está en que, desde que piensas que ella está rara, lo analizarás todo con lupa. Le has enviado un sms que dice "ei, tía, qué haces? nos tomamos un café?" y ella te ha contestado "uf, no puedo". Qué rancia, no? y por qué no puede? ves? es que no quiere ni verme, le pasa algo, y yo no le he hecho nada. Será porque el otro día... Y no, no es por eso, no le pasa nada. Sencillamente no puede.

A veces creo que le damos demasiada importancia a cosas muy pequeñitas. Pensad sobre ello... pero sin comeros la olla!

jueves, 16 de abril de 2009

En el vientre de un bloc trotamundos

En los principios de mi adolescencia sonaba por la radio un señor con voz ronca que no quería vecinas con pucheros. Y yo, que no entendía lo del puchero, ni morirse con alguien si te mata, o matarte con el otro si se muere, o como fuera aquel trabalenguas, me quedé enganchada con aquello.
En mi mayoría de edad, pasada ya la varicela, mi padre (que no sabe nada de cantautores) me regaló el nuevo disco. Descubrí que se tardan muchas más noches en olvidar, que los días que pasan entre una y otra. Supe que las rubias platino, a veces son morenas, y que las putas son más señoras que muchas señoras.
Desde entonces, y gracias a alguien más cercano a la cirrosis que a la sobredosis, descubrí (casi) todo lo que me quedaba por saber.
Y desde entonces, no me pueden hablar de Madrid, sin que piense en que es allí donde se cruzan los caminos. Sin que imagine un piso en Tabernillas donde llueve, mientras sale el Sol por Fuencarral. Sin ver a una Princesa yendo cada domingo a tu puesto del rastro.
Y me las imagino a todas, a Monica, a su primera mujer, a Jimena, Lilí Marlen, a Viridiana y hasta a la Magdalena... Y a todos, a Tolito, a Juana la Loca, al capitán de mi calle, al Nano, y al vecino de arriba...
Lo veo viajando en sucios trenes. Y cuando en la plaza de Mayo le dio por llorar. Le imagino viendo torear en Linares-Baeza. Echando dos peces de hielo en un güiski on the rocks, a la orilla de una chimenea.

Y lo mejor, escribo este post, mientras en mi MP3 suena una de La Mandrágora.

Y todo lo que queda en el tintero, porque en un solo post no cabrían las canciones más hermosas del mundo.

lunes, 6 de abril de 2009

La culpa....

Hablemos de cuernos.
Últimamente tengo demasiadas conversaciones sobre cuernos, salgo a la montaña y encontramos la cornamenta de un ciervo, la gente a mi alrededor me explica infidelidades, y los que no las viven fantasean con vivirlas.
Si le fueras infiel a tu pareja, ¿se lo dirías? La mayoría de gente distingue en este caso entre dos situaciones distintas: tener una aventura y sexo esporádico de una noche.
Esta discusión ocupó un café largo con un amigo. Y él me dijo, convencido, que no lo haría porque forma parte de su intimidad, y su compañera sufriría. Me dijo que no arreglas nada diciéndolo, y plantas una semilla horrible en la relación.
Varios días después tuve la misma conversación con mi compañero. Él cree que no me lo diría, porque no aportaría nada a nuestra relación, y para mi sería mejor no saberlo.
Yo creo que se lo diría, porque si es tan importante como para romper la relación, y no me ha importado hacerlo, es porque la relación no me importa. Y si no es tan importante, no es necesario ocultarlo.
Como todo esto es pura especulación, es muy sencillo decir lo que uno haría o dejaría de hacer.
Y llegó la confesión. Una persona cercana, me confesó que le había sido infiel a su pareja durante años. La misma pareja que tiene ahora, y a la que yo conozco. Nunca se planteó decírselo, y ahora, a toro pasado, cree que sería peor el remedio que la enfermedad. Y de toda su confesión, me quedé con algo que me dejó perpleja. Me dijo "yo no disfrutaba del sexo (con la tercera persona), porque el sentimiento de culpa me podía".
Y entonces, me di cuenta de que yo se lo diría a mi pareja para desembarazarme del sentimiento de culpa. Para tirar la pelota en su tejado. Para dejar de tener la responsabilidad de mis actos. Esperando que él no se enfadara y comprendiera. En definitiva, que lo haría para que la responsabilidad pasara a tenerla el otro.

Y por último, y como apunte final: Si no nos importa que nuestra pareja tenga amigos, se expliquen intimidades, compartan sentimientos muy íntimos, se abracen, se llamen a altas horas por la mera necesidad de hablar con alguien... ¿por qué exigimos monopolio en el terreno sexual?

.... fue del chachachá

jueves, 2 de abril de 2009

Justicia?

En primero de carrera nos pasaron una película en la que unos señores muy malos hacían algo muy malo. Se ambientaba en un poblado en Perú (creo) y la película te mostraba cómo en según qué lugar del mundo se sigue practicando el juicio público. Por juicio público me refiero a que, en comunidad, se decide el mejor castigo para los delincuentes. Generalmente estos juicios carecen de garantías, y quien decidirá si es inocente o culpable ya lo ha decidido antes del juicio.
A mi me parece fatal este tipo de prácticas, y creo que los presuntos culpables realmente lo son hasta que se dicta sentencia. Y cuando se dicta sentencia, pueden seguir siendo inocentes, pero pagan los fallos del sistema. Cosa que me parece fatal.
En España, desde hace unos años, se hacen juicios paralelos. El más actual es el caso de la chica esta cuyo cuerpo todavía no ha encontrado la policía. Todo el mundo sabe que su asesino es un chico que ha confesado el crimen (las confesiones no son la única prueba para condenar a alguien, sobre todo si no se encuentra el cuerpo y no sabemos si realmente está muerta). Y todos nos creemos con derecho a exigir justicia, porque somos una sociedad, y han matado a uno de los nuestros.
Y entonces, la gente sale por la tele diciendo "que se imponga la pena de muerte, para estos casos" y yo me pregunto, ¿será usted, señora, quien decida en qué casos aplicarla, y en qué casos no hacerlo?
Pues acabo de descubrir que una amiga se ha unido a un grupo de facebook, donde la gente pone lo suguiente:

"No puedo mas que desearle a estos anormales larga vida..Si larga vida, porque la muerte seria para ellos un salida... que sufran todo el peso de la ley 7 vidas."

"EXPULSION INMEDIATA DE LOS DELINCUENTES EXTRANJEROS."

"ESTE TIPO DE GENTE SE MERECE VIVIR MUXOS AÑOS PARA SUFIR CADA UNO DE ELLOS POR LO Q LE HAN EXO A ESTA CHICA FUERA O DENTRO DE LA CARCEL SE MERECEN PASR MAL NO TIENEN SENTIMIENTO NI CULPA ALGUNA NO SE MERECEN NADA MAS Q SUFRIR TODA SU VIDA DESGRACADOS..PUEDE SER LA HERMANA, LA HIJA O CULQUIERA DE NOOTRAS MISMAS A MI ME HA DADO MUXA PENA"

Sólo he copiado tres de los comentarios. De hecho sólo he leido estos tres comentarios. Pero es que me han dejado sin palabras.
El primero quiere que vivan sufriendo, durante siete vidas, aunque quien lo ha escrito, cuando los medios dejen de hablar del tema, se olvidará absolutamente de la chica, de los asesinos, y de todo el tinglado periodístico.
El segundo, dice algo que creo que no tiene nada que ver con el tema, porque creo que ninguno de los detenidos es extranjero. Pero, ¿por qué evitar un comentario xenófobo, pudiendo decirlo?
El tercero es de absoluta esquizofrenia. Dice que no tienen ni sentimiento ni culpa. No tienen culpa? entonces, por qué condenarles? deben pasarlo mal... fuera o dentro de la cárcel? lo que quiere esta persona es que se imparta justicia divina.

Olivdémonos de pagar más salarios a los jueces, secretarios judiciales, agentes judiciales, funcionarios de justicia en general, construir nuevos juzgados, etc. Nos podríamos ahorrar mucho como sociedad, y reinvertirlo en joderles la vida a los delincuentes.

miércoles, 1 de abril de 2009

Lo quiero todo

Tengo la profunda convicción de que la sociedad del sobreconsumo nos lleva a situaciones ridículas. Los niños quieren todo lo que ven por la tele. Los adolescentes se creen con el derecho a tener la ropa de marca, las tres consolas más guays del mercado, dinero para salir con sus amigos, un ipod, un móvil, ordenador, internet, etc. El derecho a tener todas estas cosas es un derecho vital, es decir, nació en el momento en que nacieron ellos, y no hace falta hacer nada para adquirirlo.
Y creo que los adultos también sufren un poco de todoquerismo. Quiero una relación seria, pero quiero tener libertad, pero quiero despertarme el domingo por la mañana con mi pareja al lado en la cama, pero quiero poder salir cada noche con mis amigos hasta las tantas sin que nadie me espere en casa, pero quiero un trabajo que me guste, pero quiero trabajar poco y ganar mucho, pero quiero tener hijos, pero quiero no perder la línea, pero quiero ir de vacaciones donde yo quiero, pero quiero que tú vengas conmigo, pero no quiero ir donde tú quieres, pero quiero quiero quiero.
Hemos crecido pensando que puedes tener todo lo que quieres, y creo que algunos no sabemos que, a veces, para tener algo, debes renunciar a otra cosa. Que no puedes tener una relación y acostarte con quien te apetezca. Que no puedes tener hijos, y seguir saliendo hasta las tantas cada sábado.
Y cuando eres consciente ves que para tener lo que querrías, debes renunciar a lo que tienes. Y entonces eliges. Y entonces piensas "qué pasaría si..." y crees que serías más feliz si la elección hubiera sido otra, pero sabes que no. Por eso has elegido lo que ahora tienes.