martes, 22 de septiembre de 2009

El imán

Llega un momento que una no sabe cómo actuar, ni lo que debe hacer. Dadme vuestra opinión:

Sábado a media mañana, parada de metro de Lesseps. Llego al andén y lo primero que veo es a tres rumanos (dos chicos y una chica) con clara pinta de ladrones. Que ¿por qué?, pues porque en lugar de mirar a las personas a los ojos, les miraban a las carteras.

Una, que tenía un día un poco flojo, decide entrar por una puerta diferente a la de los susodichos ladrones, para no tener ningún problema. Dado que eran tan poco disimulados, estaba segurísima de que todo el mundo les había visto el plumero.

Entran por la puerta, arrinconan a un guiri dos de ellos, preguntándole sobre el mapa de TMB. El guiri (a pesar de lo evidente de la situación) no se entera de nada. Mientras, el tercero en discordia le coge la billetera del bolsillo lateral del pantalón.

Aquí viene mi duda. Qué hago? le grito? le aviso? me callo? dejo de mirar?? al final de los finales, me angustio, y no digo nada, porque mientras me lo pienso, ya se han bajado del vagón. Y yo con la esperanza de que no hayan podido robarle la cartera, porque el guiri se ha sentado, tan tranquilo, y no ha hecho en ningún momento ademán de "ostia, me han robado la cartera".

Me quedo hecha polvo por no haber hecho nada, nerviosa y angustiada. Y cuando llego a casa, hecha un manojo de nervios, mi compañero me dice "siempre que sales sola, hay algún robo".

Recapacitando sobre su comentario, me doy cuenta de que tiene toda la razón del mundo. Tendré un imán? Conoceis a alguien que le pase tanto como a mí?

2 comentarios:

LoSt dijo...

vine a la cua del museu... a mi em saluden pel carrer ja les manguis

Anónimo dijo...

Pues chica, vete a vivir a Pedralbes...
j.