viernes, 7 de noviembre de 2008

Yo voy por mi carril

El miércoles, mientras me dirigía estresada a mi examen de kaiwa, parada en un semáforo de Consell de Cent, una moto que estaba parada en el carril-bici le dijo al de la moto de atrás "suerte del carril-moto, que sino no llegamos nunca".

Esta mañana, mientras el dolor de cabeza se hacía fuerte y me impedía pensar con un poco de claridad, he descubierto que había un sonido especialmente molesto que procedía de la calle (4 pisos por debajo).
He salido al balcón, porque cualquier excusa es buena para dejar de trabajar, y he descubierto al sujeto que provocaba el ruido. Un mercedes estaba parado en el carril bici, con los cuatro intermitentes parapadeando sin parar. Un ciclista que no tenía ninguna prisa, se ha detenido justo detrás de coche y ha hecho sonar su timbre durante un tiempo aproximado de diez minutos (de reloj).
De repente ha aparecido una señora mayor cruzando la calle entre los coches que estaban parados por el semáforo, y se ha dirigido al mercedes. Se ha sentado en el asiento del copiloto, y en ese momento me he dado cuenta de que durante todo el episodio el conductor del mercedes estaba dentro del coche.
El ciclista se ha dirigido a la ventanilla del conductor, ha discutido con él, ha colocado la bici delante del coche a escasos centímetros, y se negaba a moverse, impidiendo por tanto que el coche avanzara.
El conductor ha dado marcha atrás y ha evitado así tener que atropellar al ciclista.
Os podeis imaginar cómo me he reido por toda la situación. Creo que debemos remarcar diferentes actitudes:

1. La del ciclista que, en lugar de esquivar el coche como han hecho todos los ciclistas que venían detrás de él, se para y hace sonar el timbre hasta la saciedad.
2. El conductor del coche, que se ha parado a recoger a una persona que salía de la acera izquierda de la calle, y se para en la derecha ocupando todo el carril bici.
3. El conductor que, viendo que la persona a la que esperaba no salía, y viendo que hay un ciclista que le está recriminando que no le deja pasar por su carril, en lugar de dar la vuelta a la manzana, se queda en el mismo sitio, sin salir del coche, como si con él no fuera la cosa.

No hay comentarios: