viernes, 13 de abril de 2007

Sin noticias de Gurb

Hoy es uno de esos días en que Barcelona está triste, apagada y gris.
He salido a la calle y en las caras de la gente no se ve la alegría de una ciudad viva, la alegría que se pude leer en los rostros de la gente que un sábado al mediodía toma un aperitivo en las terrazas que invaden la ciudad. Esa alegría, los días como hoy, se esconde, celosa de su soledad, en una cueva infinita.
Pero aún con ello, con la falta de alegría, y el color gris de sus calles, está ciudad me enamora cada día. Cuando la gente de mi alrededor se va, pienso que será bonito conocer otros sitios, pero sé que nopodría estar muy lejos de aquí por mucho tiempo.

1 comentario:

Nadia dijo...

estoy de acuerdo contigo... la ciudad es preciosa... y yo, en el fondo, sé que está será siempre mi ciudad... pero también sé que podría vivir en cualquier otro lugar. hehehe! Ahora cambiando de tema, espero poder leer cada día alguna reflexión nueva! es una sensación extraña releer lo que habías escrito y darte cuenta que ya no eres la misma persona!